El PP de Sevilla ha dejado claro que el sistema educativo «no está funcionando», subrayando que la gestión que se está realizando «genera más problemas de los que resuelve», asegurando que se le «da la espalda» al profesorado y se tiene «en vilo» a los padres, a lo que suma la «falta » de ejecución de las inversiones y las infraestructuras. Así, añade que la educación en la provincia «no es cuestión de números, sino de calidad» y critica las tasas de fracaso escolar hasta el 30 por ciento.

En este sentido, la parlamentaria autonómica del PP por Sevilla, Patricia del Pozo, ha indicado que «cada día» está «más convencida» de que la educación en la provincia «funciona y se mantiene por los magníficos profesionales que existen», mientras que la gestión educativa «genera más problemas que resuelve». Así, menciona que se trata de un sistema que «da la espalda» a los profesionales y tiene a los padres «en vilo», apuntando a los conciertos escolares «en entredicho», mientras que se «cargan» los conciertos en la diferenciada».

Además, ha señalado que no ejecuta sus inversiones, indicando que entre 2009 y 2013 en la Comunidad «entre bajada de inversiones y falta de ejecución se han quedado en el camino más de 1.000 millones», a lo que suma que es donde «menos» se invierte por alumno de toda España y «no se sustituyen las bajas de los profesores».

«La educación en la provincia no es cuestión de números, sino de calidad, del resultado de la educación del alumnado», ha afirmado, recordando la tasa del 23 por ciento de fracaso escolar en ESO y del 30 por ciento en Bachillerato, lo que «demuestra que el sistema no funciona». También, apunta a «carencias» en infraestructuras, «dando la espalda a profesionales, a padres y a inversiones», unas «carencias» que ve en Almensilla, Espartinas o El Coronil, entre otros.

Ha matizado además que en municipios como Constantina se tienen terrenos desde 2009 para un instituto y «al final amplían con caracolas las que había». «Hay 25 municipios con caracolas, afectando a más de 2.000 alumnos y la educación bilingüe solo llega al 23 por ciento de los centros de la provincia», explica, subrayando que «después de que ofertan menos plazas, la falta de inversión, entre otros, con tal de evitar el fracaso escolar, se aprueban a los niños en los despachos con cuatro o cinco suspensos, esto es un hecho objetivo de que algo no está funcionando».