- José Ricardo García explica que tras las protestas protagonizadas por el sector agrario, ahora los tractoristas están recibiendo “un goteo de multas” a pesar de que las tractoradas se realizaron “de forma pacífica y sin incidentes destacables”
- El secretario general del PP de Sevilla y parlamentario andaluz muestra su apoyo “sin fisuras al sector y pide la paralización de las sanciones interpuestas”
El Partido Popular de Sevilla ha denunciado “la ristra de multas infames” del Gobierno de Sánchez a los agricultores sevillanos, sanciones que está recibiendo el sector agrario tras las protestas de los tractoristas el pasado 14 de febrero.
El secretario general del PP de Sevilla y parlamentario andaluz, José Ricardo García, ha lamentado “el goteo de multas” que están recibiendo los agricultores a pesar de que las tractoradas se realizaron “de forma pacífica y sin incidentes destacables”.
En este sentido, ha mostrado su apoyo “sin fisuras al sector y pide la paralización de las sanciones interpuestas”.
José Ricardo García ha recordado que “las protestas contaron con la autorización, coordinación y colaboración de la Subdelegación del Gobierno en Sevilla sin embargo, el Ministerio del Interior no está actuando a la altura de las circunstancias y está llevando a cabo una labor de acoso como demuestra la ingente cantidad de multas que están recibiendo los agricultores”.
“Hasta el momento, se han recibido medio millar de multas, en su mayoría sanciones de 200 euros por ‘estacionar el vehículo obstaculizando la circulación’”- y ha añadido- “un motivo totalmente contradictorio ya que ese era precisamente el motivo de la convocatoria”.
Por todo ello, el secretario general del PP de Sevilla y parlamentario andaluz ha pedido que “se paralicen de manera inmediata dichas sanciones que vienen a incidir en el maltrato y el castigo continuado a este sector por parte del Gobierno socialista de Pedro Sánchez y por el contrario, se prime, en este caso, el sentido común y nuestra Constitución”.
El PP de Sevilla ha manifestado su “rechazo absoluto ante lo que consideramos una persecución y acoso a un sector que lleva inmerso muchos años en una delicada situación, motivo por el que llevan demasiado tiempo luchando por unas condiciones justas mientras el Gobierno de la Nación sigue haciendo oídos sordos a sus protestas y reivindicaciones”.