La presidenta del PP de Sevilla, Virginia Pérez, ha encuadrado este viernes las protestas de la planta de Navantia en San Fernando (Cádiz) por temor a la pérdida del contrato adjudicado por Arabia Saudí para la construcción de cinco corbetas por 1.800 millones de euros, como consecuencia de la decisión del Gobierno de reducir la venta de armas al citado país, en los efectos del posicionamiento «de extrema izquierda» adoptado por el PSOE.

En rueda de prensa, Virginia Pérez ha recordado la importancia de este contrato negociado desde 2015 y firmado en julio por un importe de 1.800 millones de euros, suponiendo una carga de trabajo global de alrededor de siete millones de horas para los astilleros de Bahía de Cádiz, Ría de Ferrol y Cartagena y su industria auxiliar.

Mientras se calcula que la construcción de estas cinco corbetas generaría unos 6.000 empleos directos e indirectos, la presidenta del PP sevillano ha expuesto que este conflicto afecta además a trabajadores sevillanos, en alusión a vecinos de los municipios de la provincia limítrofes con Cádiz relacionados con la industria naval.

Así, ha criticado que surja este conflicto como consecuencia de la postura «de extrema izquierda» del PSOE, reclamando a la presidenta de la Junta, Susana Díaz, que «salga a defender a los trabajadores», a los cuales ha mostrado el «apoyo y solidaridad» del PP. «Es completamente inadmisible que ninguna voz del Gobierno andaluz haya salido a defender el trabajo de estos empleados», manifestaba Pérez esta mañana.