El presidente del PP de Sevilla, Juan Bueno, ha pedido este miércoles la creación de una comisión específica en la Diputación de Sevilla para analizar el modo de gestión y la eficiencia de las 16 mancomunidades y 19 consorcios existentes en la provincia, lideradas por el presidente de la institución provincial, Fernando Rodríguez Villalobos, y con la presencia de todos los partidos. Así, subraya que habría que reducir el número de entidades, advirtiendo de que el 90 por ciento «puede que no sirvan para nada, ya que la inmensa mayoría se ha reducido a un reducto para enchufar amigos y gente del PSOE».

En su intervención en el Consejo Territorial de Portavoces del PP sevillano, Bueno ha indicado que estos 35 organismos públicos desarrollan «muchísimas duplicidades» y son objeto de «oscurantismo, despilfarro y mala gestión». Así, asegura que el modelo de gestión para estas entidades del PSOE a través de la Diputación es un «absoluto fracaso», ya que supone un «entramado al servicio de este partido, con un coste inasumible para los sevillanos».

Bueno ha puesto como ejemplo a la Mancomunidad del Bajo Guadalquivir, que asegura que el PSOE, de la mano del que fuera expresidente de esta entidad y exalcalde de Los Palacios y Villafranca, el socialista Antonio Maestre, que «a pesar de su gestión, que lleva a que los ciudadanos tengan que asumir una deuda de 50 millones, es recolocado en el Consorcio del Huesna, con un sueldo nuevamente pagado por los sevillanos».

Además, insiste en que existen «hasta seis» administraciones encargadas de la gestión del agua, mencionando el Consorcio Provincial de Aguas de Sevilla, «con más de 500.000 euros de presupuesto, el 72 por ciento para personal, y tres euros para inversiones, algo vergonzoso».

«El PSOE lo que sí sabe bien es colocar a los suyos, mientras que no se dan a la oposición datos de la gestión de las mancomunidades, ni de gastos, ni de plantillas, ni el modo en el que han entrado», alerta, tras criticar que, mientras tanto, Villalobos «sólo se le ocurre decir que creará nuevos consorcios, en vez de poner remedio a lo existente», algo que achaca a que «aún le quedará gente por colocar».

Ante esta situación, Bueno asegura que hay que «reinventar» el modelo, con mejoras en los servicios y reducción de costes, asignando a cada administración una competencia y apostando por la «transparencia». «Hay que terminar con el despilfarro y la mala gestión, como hacen los alcaldes del PP», sentencia.