El PP de Castilleja de la Cuesta  ha denunciado que el alcalde socialista, Manuel Benítez,  “incumple sistemáticamente las normas de tráfico ya que, además de aparcar el coche en zona amarilla y en dirección prohibida, también ha estacionado su coche particular en un espacio reservado para minusválidos en la puerta del Ayuntamiento”.

La portavoz del PP de Castilleja de la Cuesta, Juana Rodríguez, ha asegurado que “a pesar de que el alcalde intente echar balones fuera y asegurar que se trata de un hecho puntual, no es la primera vez que se salta las normas de circulación, sino que, lamentablemente, es un comportamiento habitual de este alcalde que actúa como si fuera el pueblo fuera suyo y olvidando que se debe a los vecinos”.

“Cuando el PP denunció que el alcalde incumplía las normas de tráfico mientras la Policía Local miraba para otro lado, Benítez dijo que se había detenido en una zona prohibida a la que accedió en dirección contraria sólo un momento, sin embargo, todos los vecinos de Castilleja sabemos que esta excusa es absolutamente falsa y que su comportamiento habitual es saltarse las normas de trafico y aparcar en zonas prohibidas en muchos días y durante mucho más tiempo del que el asegura”.

“Castilleja de la Cuesta le importa muy poco al alcalde. Lo ha demostrado aparcando donde le viene bien cada vez que quiere,  sin importarle si con ello entorpece la circulación o impide que personas con minusvalías estacionen en los sitios que tienen reservados”.

Según la portavoz del PP en Castilleja de la Cuesta, “conductas como la del alcalde demuestran qué clase de gobernante sufren los castillejanos que no merecen que su regidor use el municipio a su antojo en vez de trabajar sin descanso por mejorar el bienestar general, como le están reclamando muchos vecinos”.

“Por ello, desde el PP de Castilleja exigimos al alcalde explicaciones ante un comportamiento absolutamente reprobable e indigno de cualquier ciudadano pero más aun cuando es un representante público”.

El comportamiento de Manuel Benítez ya se vio salpicado por cuestiones relacionadas con el tráfico. El alcalde estuvo imputado por una presunta infracción penal al quitar en reiteradas ocasiones sanciones de tráfico a sus allegados. También fue imputado por un presunto delito de malversación de caudales públicos, al echar combustible en su vehículo privado con vales  de gasolina de vehículos del Ayuntamiento.